Cómo aguantar las ganas de ir al baño
Consejos para controlar la necesidad de orinar
Muchas veces, es común experimentar la necesidad repentina de ir al baño. Esta situación puede hacer que nuestro día sea muy incómodo. Sin embargo, hay algunas formas de controlar la ganas de orinar en cualquier momento. Aquí los consejos para ello:
- Beber un vaso de agua: Beber agua puede calmar nuestros impulsos de orinar. El hecho de tener el estómago lleno nos ayudará a controlar la sensación.
- Hacer ejercicios: Gracias a la actividad física, nuestra musculatura abdominal se relaja, ayudando así a retener la orina.
- Beber té verde: Esta popular bebida natural es conocida por tener efectos diuréticos, lo que significa que estimula la micción. Para evitar tener ganas de ir al baño, intenta evitar tomar té verde.
- Distraerse: Puedes tratar de mantener la mente ocupada con alguna actividad para resistir el impulso de orinar. Usa este método para alargar el tiempo entre una visita al baño y otra.
Si estás experimentando sensaciones constantes de necesidad de orinar, es importante consultar al médico para descartar alguna condición de salud subyacente. Si ésto no es el caso, siguiendo estos consejos, puedes poner el control sobre tus ganas de ir al baño.
¿Cuánto tiempo se puede aguantar las ganas de defecar?
La doctora Juana Carretero, de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), pone un límite de tiempo aproximado: “Lo habitual es no estar más de tres días consecutivos sin ir al baño. Eso si se mantiene una dieta normal y se ingieren líquidos en abundancia”. Según explica la experta, es recomendable acudir al baño habitualmente, y no forzar los esfuerzos para “aguantar” el baño. El no hacerlo puede conllevar problemas de estreñimiento que pueden acabar con los esfínteres débiles. Para la doctora Carretero, es importante que la persona sepa distinguir entre el esfuerzo por continencia por salud y por otros motivos. Esta última situación, añade, puede llevar a acostumbramientos nocivos para el intestino, como el hecho de controlar con ayuda de la postura o esfuerzos el tiempo de defecar.
¿Qué pasa si me aguanto las ganas de ir a defecar?
De hecho, posponer habitualmente las ganas de evacuar y ralentizar el «tiempo de tránsito» intestinal puede estar asociado con un mayor riesgo de problemas como cáncer de intestino, diverticulosis (pequeñas bolsas del revestimiento del intestino que sobresalen a través de la pared intestinal), hemorroides y fisuras … por lo tanto, es muy recomendable intentar evacuar tan pronto como el cuerpo nos lo indica para mantener una salud óptima.
¿Qué hacer para aguantar las ganas de ir al baño?
Céntrate en los líquidos y el alimento Bebe más de tus líquidos por la mañana y por la tarde en vez de por la noche, Evita el alcohol y las bebidas con cafeína, como el café, el té y los refrescos de cola, que aumentan la producción de orina . Intenta comer alimentos a base de fibra como el pan integral, los cereales, las verduras y las frutas. Esto puede ayudar a regular el tránsito intestinal y reducirá la necesidad de ir al baño con frecuencia. También es recomendable evitar alimentos que estimulen la actividad en el intestino, como el chocolate, los productos lácteos y el alcohol. Trata de no suprimir el desayuno para evitar el temido efecto rebote durante el resto del día. Finalmente, procura reducir la cafeína en tu alimentación.
¿Qué pasa si te aguantas del 2?
En el caso de retener las ganas de defecar, una de las principales consecuencias es el estreñimiento. Si al llegar las heces al recto no evacuamos, nos encontramos con diferentes problemas: El primero, es que las heces al permanecer más tiempo de lo normal en nuestro intestino, se vuelven más secas y duras. Esto se suma al hecho de que, al no evacuar lo suficiente, el cuerpo se ve obligado a reabsorber más líquido de los intestinos. Por ende, cuando la presión de nuestro colon aumenta por la acumulación de residuos, notaremos dolores abdominales, debido a la inflamación. Además, se dificulta el tránsito intestinal. No hay que perder de vista que existen trastornos crónicos que podemos desarrollar por esta causa como la hemorroide, el prolapso rectal y el síndrome de intestino irritable. Por lo tanto, cuando se sientan ganas de defecar, es conveniente no ignorarlas.
Cómo aguantar las ganas de ir al baño
Puede ser extremadamente molesto sentir la necesidad constante de ir al baño. Estas necesidades pueden aparecen cuando menos te lo esperas y se pueden quedar contigo hasta que encuentres el baño adecuado.
En este artículo te enseñaremos 5 consejos para aguantar las ganas de ir al baño y mantenerte libre de esta molestia temporalmente. Puedes probar los consejos uno a uno para encontrar el que te resulte más útil.
1. Mantenga el abdomen relajado
Es común que cuando no podemos contener las necesidades de ir al baño, nuestro abdomen se contraiga o se tensa, lo que aumenta la sensación de urgencia y empeora la situación. Por ello, si te paras y notas el abdomen contraído, relájalo. Esto ayudará a relajar tu vejiga y conciliar el camino para aguantar.
2. Cambia de posición
Permanece de Pie. Aún si no puedes caminar, cambiar de postura te resultará útil para aliviar la sensación de urgencia. Puedes optar por sentarte en el suelo con las piernas cruzadas, dobladas, o cambiar ligeramente el cuerpo. Intenta en movimiento siempre que puedas.
3. Distráigete
Uno de los mayores problemas de las ganas de ir al baño es que no puedes evitar prestarle atención. Prueba a distraerte con actividades que involucren tu mente, eso te ayudará a olvidar tus ganas por un rato. Prueba abriendo tu móvil y navegando en internet para ver temas interesantes, habla con alguien de tu alrededor, escucha música relajante, etc.
4. Siéntate y espera
Intenta esperar unos minutos para ver cambiar la situación. A veces, la vejiga se relaja más rápido de lo que creemos, no es nada extraño que te encuentres en la misma situación. El truco es resistir a la tentación de levantarse y cambiar de postura para buscar el baño. Prueba a sentarte e intenta relajar tu mente.
5. Ingiere algún líquido
Tomarte una bebida como café, té, agua o jugo de fruta puede ayudar a las ganas de ir al baño. Por el contrario, demasiado líquido también puede empeorar la situación, por lo que debes intentar encontrar un equilibrio entre la cantidad que ingieres para aliviar los síntomas y no empeorar la situación para ir al baño.
Conclusión
Las necesidades de ir al baño son una situación desconcertante e incómoda. No puedes evitarlas, pero sí es posible aprender a controlar la sensación de urgencia. Prueba alguno de estos 5 consejos para aguantar las ganas de ir al baño:
- Mantén el abdomen relajado.
- Cambia de posición.
- Distráete.
- Siéntate y espera.
- Ingiere algun líquido.