La cebolla es una hortaliza muy apreciada a nivel mundial como ingrediente culinario, ya que su bulbo tiene un sabor intenso, lo que la convierte en un gran aliño para una gran cantidad de platos y salsas. Además, es muy valorada en el mundo de la medicina porque contiene grandes propiedades que son buenas para nuestra salud.
Si deseas aprender como plantar cebollas en casa, no dejes de leer este artículo, donde además te explicamos cuándo es el mejor momento para plantarlas.
Cuándo plantar cebollas
El mejor momento para plantar cebollas es a finales de otoño, a ser posible con la luna en fase menguante. A fines del invierno y principios de la primavera, las cebollas deben ser plantones listos para plantar en el exterior. Si vives en una zona con un clima particularmente frío, espera que pasen las heladas para trasplantar los plantones.
Cómo plantar cebollas sin semillas
Una de las ventajas de las cebollas es que no es necesario ser un gran profesional para plantarlas. Esta es una de las tareas más fáciles y a continuación te explicaremos cómo hacerlo. Si vamos a plantar cebollas sin semillas necesitaremos los siguientes materiales:
- Una maceta larga: debe tener al menos 15 centímetros de profundidad.
- Cebollas: no importa su tamaño.
- Tierra o sustrato para macetas.
Una vez que tenemos los materiales necesarios, comenzamos a plantar las cebollas. Para hacer esto, necesitamos hacer lo siguiente:
- Coloca el sustrato para macetas o tierra en la maceta
- Cortar la base de la cebolla: se debe cortar alrededor de 2 o 3 centímetros máximo.
- Planta los esquejes que hemos hecho en la maceta y en posición horizontal.
- Cubre la cebolla plantada con 5 centímetros de tierra y riégala
- La maceta debes estar en un lugar en el que reciba entre 7 y 8 horas de sol.
- En un mes, los brotes de cebolla habrán crecido aproximadamente 20 centímetros. En este punto tendrás que quitar los brotes. Deben ser verdes en la parte superior y blanquecinas en la raíz.
- Trasplante los brotes de cebolla: primero deberás separar la tierra pegajosa y evitar sacar las raíces.
- Planta los nuevos brotes: hazlo a una distancia de 8 cm entre cada nuevo brote.
Cómo plantar cebollas con semillas.
Una de las técnicas para plantar cebollas es hacerlo a través de un semillero o germinador, en caso de que decidas plantar semillas de cebolla. A diferencia de muchos otros bulbos y tubérculos, las cebollas reconocen e incluso dan la bienvenida al trasplante, por lo que plantar en semilleros ayudará a asegurar una germinación abundante.
Para plantar cebollas con semillas en un semillero, preparando el sustrato tu mismo, sigue estos pasos:
- Utiliza sustrato para semillero: se recomienda utilizar turba mezclada con humus de gusano que puedes enriquecer con perlita y vermiculita.
- Mezcla las semillas de cebolla con fibra de coco: procura no poner demasiadas semillas, ya que son muy pequeñas y es muy probable que germinen casi todas.
- Extiende la mezcla de fibras y semillas sobre el sustrato preparado.
- Riegue para dar humedad: asegúrate de que haya un drenaje adecuado en el semillero, tal como debería haber en la maceta, como cuando sembramos cebollas sin semillas. En un poco más de una semana deben empezar a germinar.
Cuidado para plantar cebollas.
Como se mencionó, las cebollas son una de las verduras más fáciles de cultivar. Sin embargo, aquí hay algunos consejos y cuidados básicos del cultivo de cebollas para que nada se interponga en tu objetivo de plantar cebollas.
Tierra para cultivar cebollas
Lo más importante cuando se cultiva cebollas es el suelo. Esta planta es muy exigente en cuanto a nutrientes y, por lo tanto, requiere suelos ricos en materia orgánica. Prefiere suelos de textura suelta, preferiblemente franco arenoso. Puede crecer en suelos arcillosos, aunque con dificultades, y los suelos muy arenosos darán bulbos mal formados, pequeños y de sabor demasiado intenso.
Luz y ubicación
En cuanto a la luz, las cebollas aprecian y necesitan un gran aporte de luz solar, por lo que se recomienda plantarla en un lugar donde reciba la máxima luz posible.
Riego de las cebollas
En cuanto al riego, esta planta necesita muy poca agua, especialmente después de la formación de los bulbos. Durante su crecimiento en semilleros, puedes regarlas cada vez que notes un sustrato seco, pero una vez formado el bulbo, debes tener mucho cuidado con los riegos excesivos. Si la planta recibe demasiada humedad, el bulbo se pudrirá, así que trate de regar lo menos posible.
Limpieza y despunte del tallo
Debes prestar atención a la limpieza de plantas adventicias o malas hierbas. Tienden a tener una gran capacidad para drenar los nutrientes del suelo y pueden agotar las cebollas. Adicionalmente, si su cebolla está floreciendo, debes despuntar el tallo floral, de lo contrario, es posible que los bulbos no se desarrollen correctamente.
El cuidado de las cebollas en maceta
Si vas a plantar tus cebollas en una maceta, asegúrate de que el recipiente tenga orificios de drenaje y sea lo suficientemente profundo, y coloca la maceta en un punto con la mayor cantidad de luz solar directa posible, como se mencionó anteriormente.
Cuándo cosechar cebollas
La primera y más importante señal a la que debes prestar atención cuando puedas cosechar tu cebolla, la encontrarás en las hojas de la planta. Cuando las puntas de las hojas comienzan a ponerse amarillas, rompe los tallos o cuellos de la planta torciéndolos y déjalos en el mismo suelo sin tomarlos.
De esta forma provocamos el inicio de la etapa de maduración de la propia cebolla. Una vez hecho esto, utiliza una horquilla u otro utensilio similar con mucho cuidado de no dañar la cáscara de los bulbos, levanta un poco la cebolla, pero sin desenterrarla. Así iniciamos el proceso de secado del bulbo.
Unos días después de romper los cuellos de las plantas y alzar los bulbos, puedes desenterrar la cebolla y déjar que se sequen al sol por dos semanas. Es fundamental que los bulbos estén completamente secos si quieres disfrutar de unas buenas cebollas, por lo que después de estas dos semanas al sol se recomienda recogerlas, atarlas y dejarlas en un lugar fresco y seco para su conservación y secado final.
¡Ahora todo lo que tienes que hacer es disfrutarlos en tus salsas y platos favoritos!