Las enredaderas son una opción fantástica si quieres cubrir un muro con plantas, decorar una pérgola o valla. Anteriormente, ya hemos hablado de cultivarlas y mantenerlas, por eso esta vez hablaremos de que hacer para poder trasplantarlas de forma eficaz.
Partiendo de que ya sabes que el trasplante es la extracción de una planta de un sitio de plantación a otro, te dejaremos algunos consejos para trasplantar vides.
Tamaño de las enredaderas
Las enredaderas o trepadoras de tamaño grande o magnate suelen tener complicaciones a la hora de realizar el trasplante, lo que hace que en la mayoría de los casos no se realice.
Se suele descartar su trasplante, ya que al estar muy pegadas a una pérgola o muro es muy difícil separarla sin que se rompa, encima de que tendrás que podar todas sus ramas para poder hacerlo y no vale la pena, pues te quedarás prácticamente con una planta pelada.
Cómo trasplantar una enredadera según el tamaño
- Si la enredadera es pequeña: Envuelve el cepellón en plástico duro o tela y amárralo duro para que no se rompa ni se desmorone.
- Sí es grande: Deberás envolverlo con una tela metálica y luego colocarle escayola para asegurar de que se mantenga en buenas condiciones.
Especies de enredaderas
Hay especies que son más fáciles de trasplantar y otras son incapaces de superar que se rompa la mayoría de sus raíces.
En cualquier caso, todas las plantas sufren un trauma al trasplantarlos, ya que pierden algunas de sus raíces, por lo que siempre necesitan tiempo para recuperarse.
Trasplantar en invierno
El trasplante de la enredadera debe hacerse cuando la planta está inactiva, que siempre es invierno. Nunca lo hagas cuando esté en etapa de crecimiento, ni en primavera ni en verano, porque la dejarías sin raíces en el momento en que las flores y las hojas más las necesitan.
El otoño igualmente puede ser una buena época, aunque no en zonas donde hace calor y las plantas siguen creciendo. Evita los periodos invernales cuando hay heladas y mucho frío, para que las raíces no sufran demasiado.
Cómo hacer un trasplante
Al hacer el trasplante, asegúrate de que el suelo esté un poco húmedo antes de desenterrarla y realizar una poda importante para acortar lo largo de las ramas y hacer su transporte más sencillo.
Cuando lo muevas a su nueva ubicación, necesitas plantarlo haciendo un buen agujero y mezclando la tierra con compost orgánico. Riégala para que comience la etapa de gestación y asegúrate de que nunca se seque, ya que sus raíces están débiles debido al trasplante y necesitan mucha agua para desarrollarse.