La menta es una de las plantas aromáticas más comunes y populares. La menta es una planta conocida desde hace siglos por su agradable e intenso olor, por lo que se utiliza para muchos fines.
Uno de ellos es usarlo para perfumar diversos platos o infusiones, pero tiene muy buenas propiedades para la salud y se usa en cosmética. Por ello, es normal cultivarla en macetas en nuestros hogares.
Así que, si quieres tener uno en tu casa, sigue leyendo este artículo donde hablaremos de como cuidar plantas de menta en macetas.
Características de la planta de menta
La Menta es una planta herbácea perenne de la comunidad de las labiadas, que incluye varias especies e híbridos. La forma de sus hojas es tan atractiva y variada como sus sabores. Estas incluyen plantas con una distribución muy cosmopolita, que se encuentran en casi todo el mundo.
La menta es una planta que tiene muchas aplicaciones en los hogares. Sirve como especia en nuestras recetas, realizar infusiones o añadir un toque fresco a diversos postres. Hay una gran variedad de mentas, como la menta de Tashkent (Mentha spicata ‘Tashkent’), la menta piperita o menta chocolate, ya que sus hojas son de color marrón y tienen un sabor similar al cacao, la Mentha arvensis o una de las más famosas, la hierbabuena (Menta spicata).
Guía para cuidar las plantas de menta en macetas
Como hemos dicho, es una planta herbácea de tallo abundante que tiene una tendencia a crecer lateralmente, tanto en la superficie como enterrada o bajo tierra, a través de sus estolones o brotes laterales. Por eso, la mejor forma de hacerlo crecer denso es plantándolo en la tierra del jardín, pero si no tenemos espacio, podemos tenerlo en casa, internamente o fuera.
Siguiendo estos consejos para el cuidado de las plantas de menta en macetas. Verás que la planta es muy fácil de cuidar.
Luz y temperatura para la menta
Para cultivar menta en una maceta necesitas encontrar un lugar que tenga buena iluminación y que permite su crecimiento. El desarrollo de la planta necesita un aporte constante de nutrientes, por eso es importante elegir un buen fertilizante orgánico o lo más natural.
Es recomendable mantenerla en una temperatura entre 15 °C y 20 °C durante las primeras etapas de su crecimiento.
Elegir una maceta adecuada para la menta
Es muy importante elegir bien la maceta para la menta, ya que será el lugar donde la cultivaremos, al ser una planta que crece en horizontal, es recomendable utilizar una maceta ancha y de unos 20 cm de profundidad para que crezca bien en la menta. Asimismo es importante tener un buen drenaje, en este otro artículo podrás aprender todo sobre el drenaje en maceta.
Cómo regar la menta en una maceta
El riego de la mente necesita ser abundante y regular, especialmente durante el período de crecimiento en primavera y verano. Esto hace que la planta florezca en el momento adecuado, y que la calidad del sabor y olor de sus hojas sea la correcta. Al regarla podemos utilizar fertilizante que aporte los nutrientes necesarios durante la época de crecimiento.
La floración de la menta
Lo normal es que la menta florezca a principios de verano, momento que podemos aprovechar para cortarla y dejarla unos 15 cm por encima de la tierra de la maceta para que vuelva a crecer. Con el uso de fertilizantes y riego conseguiremos mantener la planta hasta principios de otoño, pero cuando llegue el frío, la parte aérea de la menta morirá, pero no sus tallos subterráneos, que volverán a desarrollarse en primavera.
Cómo podar una planta de menta
Dado su crecimiento horizontal, es importante podar la menta para controlar el tamaño de la planta en maceta y quitar algunas hojas, lo que favorecerá el crecimiento de nuevos brotes y la futura floración.
Cómo reproducir la menta en una maceta
Ahora que ya sabes cómo cuidar la menta en maceta, quizás te interese conocer cómo reproducirla, ya que crece fácilmente y es una planta que se debe tener en casa por todos sus usos y beneficios.
En el momento en que las macetas están muy saturadas, es posible rejuvenecer la planta y reproducir la menta. Debes quitar algunas de las raíces de la planta. Cortar estas raíces a la mitad, separando los bordes y podrás plantarlas de nuevo con tierra nueva o compost.
Adicionalmente, la menta es una planta que se reproduce fácilmente por esquejes. Los esquejes son una forma sencilla de propagar las plantas, debes colocar tallos de unos 10 cm con compost húmedo en macetas o colocar los esquejes en agua hasta que desarrollen raíces.
Otros consejos para el cuidado de las plantas con menta en macetas
Es recomendado usar menta fresca, aunque si esto no es posible, se pueden conservar las hojas de la planta cuando muere. Así podemos recolectar los brotes, lavarlos bien, secarlos en un centrifugador de verduras, cortarlos en trozos pequeños y ponerlos en un recipiente tipo cubitera, llenaremos este recipiente con agua y lo congelaremos. De esta manera podemos tomar un cubito de hielo cuando necesitemos menta para cocinar.
Si lo que queremos es cultivar diferentes variedades de menta tenemos que hacerlo por separado, porque si no se desvanecerán muchos de los sabores y aromas de cada variedad al mezclarse mucho.
En la maceta podemos retener la humedad cubriendo su superficie, por ejemplo, con corteza de pino, musgo húmedo u hojas húmedas y trituradas. Esto ayudará a que el agua no se evapore tan rápido y las raíces no se encharquen si la maceta tiene un drenaje adecuado.