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El Energy Observer partió de París para un amplio delirio: seis primaveras más o menos del planeta sin emitir emisiones a la entorno.
La lucha contra el cambio climático incluso consiste en gestos. Adicionalmente de las medidas que deben imponer los países, la transformación de las industrias y la nueva posición de las empresas y las personas, los gestos incluso ayudan. Es promover todas las demás cosas. Son símbolos, pero penetran en las personas, haciendo que la opinión pública exija un cambio. este de Observador de energía Es solo eso: un aspaviento. Pero su simbolismo es uno que excita la conciencia y pasión a la advertencia.
Esta nave solar, que partió de París el 4 de julio, tiene la ocupación de mantenerse a flote durante seis primaveras. Sin repostaje. seis primaveras en los que Será abastecido por la energía del sol y del singladura complementado con un tanque de combustible de hidrógeno.
Energy Observer no emite emisiones contaminantes a la entorno. Su parte superior es cubierta de paneles solares mientras que varios molinos de singladura se muestran como las únicas banderas que muestra el barco. Se negociación de un catamarán cuyo casco se divide en dos, dejando un amplio hueco en el segmento central. Así podrás navegar más rápido y, sobre todo, consumir menos energía en la carretera.
La historia de este barco se remonta a mucho tiempo a espaldas. Originalmente fue diseñado en 1983 como un barco de carreras. Pero tiene una segunda vida , gracias sobre todo a dos entusiastas de las energías renovables. Frederick Dahirel y Victorien Erusard impulsaron la transformación del barco.
Tras una inversión de 5 millones de euros el barco ha sido completamente renovado y reconstruido. Sus casas tienen 30,5 metros de amplio para recoger energía de fuentes eólicas, solares y hídricas. El postrer caso es el del combustible de hidrógeno, que se genera por el proceso de electrólisis del agua de mar.
El tesina está siendo considerado invitado 50 países y haz 101 paradas. Su objetivo, según sus creadores, no es más que disputar contra el cambio climático. No solo simbólicamente. El Energy Observer es un laboratorio propio, donde estas tres fuentes de energía diferentes se combinan para impulsar sus motores. La tripulación controlará cómo funciona el mecanismo.
Adicionalmente, el barco pretende aterrizar promoviendo las energías renovables y los esfuerzos para combatir el calentamiento universal. De la misma forma, recopilará ideas para que sus visitas se repliquen en otros lugares.
Imágenes: SirisVisual, Energy Observer
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