Si comienzas a realizar estos ejercicios a diario, sufrirás menos dolores de espalda a medida que tu abdomen crece.
Posición de Loto, siéntate en esta postura sobre una colchoneta fina o una alfombra para estar cómoda. Extiende los brazos en forma de cruz y realiza rotaciones con los hombros, alternando ocho veces hacia delante y ocho hacia atrás.
Espalda Firme, partiendo de la posición anterior, eleva los brazos por encima de la cabeza, une las palmas de las manos y extiende toda la espalda con suavidad (sin forzarla) durante unos segundos. Baja los brazos y relájate.
Arriba y Abajo, boca arriba, flexiona las piernas y apoya los talones cerca de los glúteos. Eleva la pelvis hasta que te apoyes sobre los pies y los hombros, cuenta hasta cinco y desciende lentamente. Repite el ejercicio cuatro veces.
El Gato, apóyate sobre las rodillas y las palmas de las manos, arquea la espalda hacia abajo, extiende la pelvis hacia atrás (sacando trasero) y mira al frente. Sin cambiar de postura, pasa a l a siguiente posición.
Puente y Tobogán, acerca la barbilla al pecho, eleva la espalda (haciendo un puente) y lleva la pelvis hacia el vientre. Repite volviendo a la postura anterior (5 veces). Apoya los glúteos sobre los talones, el vientre entre los muslos y la cabeza en la colchoneta. Estira los brazos, fuerza la extensión de la espalda y relájate contando hasta 10.